Fue elevada a juicio por la Justicia Federal la causa contra el hombre que permanece detenido desde junio, cuando se le descubrió esa carga en la localidad de Las Peñas. Se trata del mayor operativo de Gendarmería en territorio de la provincia de Córdoba.
Por Juan Federico
El 6 de junio último, los gendarmes estaban expectantes. Una supuesta llamada anónima que ingresó en el teléfono celular del comandante Marcelo de la Cruz, jefe de la Unidad Especial de Investigación y Procedimientos Judiciales Córdoba de Gendarmería Nacional, permitió desencadenar el mayor secuestro de droga de la historia de esa fuerza en la provincia.
Del otro lado del teléfono, alguien le apuntó que por la ruta nacional 9, desde Santiago del Estero, habían ingresado en territorio cordobés dos vehículos, una pick-up Chevrolet S10, blanca y con vidrios polarizados, y un auto de color negro, que llevaban una “importante” cantidad de droga.
Ante este dato, se diagramó un operativo en la ruta para detectar a los vehículos apuntados. Fue entonces que, cerca de las 4, los gendarmes divisaron que se aproximaba una camioneta similar a la descripta, cuyo conductor, al ver el puesto de la fuerza, según consta en la causa, realizó una maniobra unos 100 metros antes, giró a la izquierda y se internó por un camino paralelo a la ruta 9 norte, a la altura de la población de Las Peñas, cerca de la localidad de Villa del Totoral, 100 kilómetros al norte de la ciudad de Córdoba.
Sin embargo, no llegó muy lejos, ya que cerca de allí fue interceptado por los gendarmes, que la obligaron a frenar.
Siempre de acuerdo a la causa, le solicitaron documentación personal y del vehículo y, al notar que llevaba en su interior muchos bultos, le pidieron que informara sobre lo que transportaba. Como respuesta, el conductor, Adrián Roberto Lazarte (41), exhibió una documentación que a primera vista no coincidía con las cajas que llevaba.
El hallazgo. Como esa mañana lloviznaba, se trasladó al conductor y a su vehículo, más dos testigos, hacia una estación de servicio cercana, donde se registró la camioneta.
Fue entonces que los gendarmes constataron que había cajas que en total contabilizaban 397,769 kilos de picadura de marihuana. Las cajas estaban nombradas por letras, en orden alfabético, de la A hasta la S, y en el interior de cada una había entre 10 y 12 paquetes (en forma de “ladrillos”) numerados, que oscilaban entre los 17 y los 30 kilos cada uno.
Además, se dejó constancia del secuestro de 534 pesos, cinco dólares, un aparato de sistema de posicionamiento global y 16 rollos de cinta de embalar marrón, entre otros elementos.
El mismo día del operativo, desde Gendarmería estimaron que lo secuestrado equivalía a 1.600.000 pesos aproximadamente. En ese sentido, el comandante mayor Federico Sosa, del área operativa de la fuerza, señaló que el procedimiento era el más importante que la fuerza nacional había realizado en su historia en territorio de la provincia de Córdoba.
Tras ello, se labró el acta correspondiente que fue firmada por los testigos, mientras que Lazarte, detenido, quedó a disposición de la Justicia Federal. Días después, el fiscal federal Nº 2, Gustavo Vidal Lascano, tomó declaración indagatoria al detenido, quien en su defensa alegó que sólo la sustancia estupefaciente no era de su propiedad y que él solamente se encargaba de retirarla y entregarla.
Para el fiscal, “resulta cuasi irreal que haya retirado casi 400 kilos de marihuana para transportarla y cobrar por ello, alegando desconocimiento de la gravedad del hecho”.
“Él mismo –reprochó– vio el material al cargarlo en la camioneta cuando pasó a retirarlo en el puente de la ciudad de La Banda, Santiago del Estero, y además, se percibía, por la misma naturaleza de la cannabis sativa, su fuerte aroma, conforme los testimonios aportados por el personal actuante”. Con los datos reunidos, ahora Vidal Lascano elevó la causa a juicio, imputando a Lazarte por el supuesto delito de “transporte de estupefacientes”. El acusado tiene domicilio en Río Cuarto, y se sospecha que esa ciudad era el destino final de la droga.
Publicado en el diario La Voz del Interior, Córdoba, Argentina, el miércoles 19 de octubre de 2011.
Crónicas de la Calle 